Blesa (Foto: http://www.blesa.info/blesa.htm)Lamentablemente se desconocen los autores de numerosos sucesos cometidos por la geografía aragonesa. Conociendo sus nombres podríamos seguir la pista de muchos de robos y asaltos en despoblado, que se realizaron a lo largo del siglo XIX y comienzos del XX por la geografía aragonesa, incluidos algunos crímenes.
Nos vamos a Blesa y nos situamos en la posada del pueblo regentada por Felipe Tomey, en la noche del 2 al 3 de diciembre de 1890. Cinco hombres entran en la posada; uno tenía aproximadamente, 24 años, era buen mozo, de nariz abultada, y vestía calzón corto, de tejido claro de verano, con medias pardas, blusa de fondo oscuro, tapabocas oscuro, alpargatas nuevas pasadas a lo miñón, pañuelo de seda a la cabeza de color magenta a cuadros negros y calcetines oscuros.El tapabocas oscuro ya hizo temblar al posadero. Le acompañaban otro de 32 años, alto de estatura y grueso con cara afeitada; el tercero tenía unos 50 años, también grueso, pero de estatura regular, y vestía con calzón corto al estilo del país. Los otros dos iban embozados con tapabocas oscuros. Quizá fueran los primeros en acceder al establecimiento.
Inmediatamente dejaron claro cuáles eran sus intenciones. Sin dilaciones exigieron al dueño de la posada, Felipe Tomey, el dinero y le robaron entre 18 y 20 duros. No sabemos cuántas personas se encontraban en el lugar, ni cómo reaccionaron ante el robo, pero lo cierto es que los ladrones dejaron un rastro de sangre. Con motivo del robo dieron muerte al vecino del mismo pueblo Felipe Nuez.Fuente de información:
- Boletín Oficial de la Provincia de Zaragoza, 25 de diciembre de 1890.
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